Chequeo médico continuo: supervisión profesional para monitorear el estado de salud durante el proceso de desintoxicación y recuperación.
Trato humano y respetuoso: garantizamos un ambiente donde cada usuario se sienta valorado y comprendido, promoviendo la confianza y la tranquilidad.
Instalaciones cómodas y adaptadas: nuestras instalaciones están diseñadas para proporcionar un espacio seguro, limpio y propicio para la rehabilitación.
Alimentación balanceada: ofrecemos una dieta cuidadosamente planificada para apoyar la recuperación física, asegurando que los usuarios reciban los nutrientes necesarios.
Terapias individuales y grupales: brindamos sesiones terapéuticas personalizadas que permiten a cada persona explorar sus emociones y recibir apoyo grupal para compartir experiencias y construir redes de apoyo.
Talleres de sensibilización: actividades diseñadas para ayudar a los usuarios a reflexionar sobre los impactos de las adicciones y desarrollar estrategias para prevenir recaídas.
Talleres espirituales: espacios para conectar con la espiritualidad, fomentar la introspección y encontrar propósito y fortaleza en el proceso de sanación.
Consejeros especializados en adicciones: un equipo capacitado que trabaja de manera cercana con cada persona, brindando orientación y acompañamiento en cada etapa del tratamiento.